Opinión

Europa Estrategia Junio 2024 “Más gradual y más lenta, pero la normalización sigue estando ahí”

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La resiliencia económica ha continuado en la primera mitad del 2024, con EE.UU. a la cabeza, apoyada en la fortaleza de los mercados laborales, en las políticas fiscales expansivas y en la fuerte inmigración americana, y sin olvidar los efectos de la desinflación, la inversión en IA y la aceleración de las operaciones de M&A.

En EE.UU. la revisión al alza de las expectativas del PIB 2024 ha sido fulminante durante la primera mitad el año: Esperamos, como la mayoría del mercado, un crecimiento en 2024 del 2,5%, con un consumo moderándose a lo largo del año. Todavía los datos que se van publicando son mixtos, pero apuntan hacia esa moderación y a la reducción del riesgo de calentamiento económico.

En Europa, en cambio, lo que se está apreciando en los últimos meses es una mejora de expectativas, apoyando su salida de la estanflación, reduciéndose en cierta medida el dispar comportamiento de las economías core vs las periféricas. Así, esperamos un crecimiento del 0,8% de PIB 2024, con un paulatino mejor comportamiento del consumo a lo largo del ejercicio gracias a la mejora de la renta disponible. En manufacturas, aunque muchos indicadores soft han mejorado, todavía continúan las dudas. China, una de las claves para este aspecto, continúa mostrando datos mixtos y debilidad de la demanda interna.

La desinflación ha seguido avanzando en ambas zonas, con mayor confianza en la UE que en EE.UU., enfrentándose en la última milla con obstáculos como la continua fortaleza del consumo de servicios y la tensión del mercado de la vivienda americana.

Consideramos todavía optimistas las expectativas del mercado de rebajas de tipos de interés oficiales por parte de los bancos centrales. Pensamos que el cierto mejor tono que apreciamos en la economía europea reducirá la presión sobre el BCE para realizar su segunda bajada de tipos pronto y probablemente espere a que la FED realice su primera bajada. En el caso de la FED, la resiliencia de esta economía y la lentitud de la bajada en la última milla de la inflación, así como el calendario electoral, le llevará a solo realizar una bajada este año, no esperándola hasta diciembre. Así apuntamos en total en este año a 25 p.b de bajada en la FED y 50 pb en el BCE (vs 50 y 75 pb respectivamente esperadas por el mercado).

En cuanto a tipos a largo, consideramos que los riesgos están equilibrados entre desinflación y necesidad de financiar el stock de deuda, esperando la rentabilidad del bono 10Y de EE.UU. en la banda 4,2-4,8% y del bund en 2,25-2,75%.

El principal riesgo a nuestro escenario es una mayor tensión de lo esperado en la inflación, que lleve a la FED a seguir retrasando la bajada de tipos con el consiguiente posible efecto abrupto en la economía. Vemos más riesgos por el lado de la inflación que por el lado del crecimiento. En China, la crisis inmobiliaria sigue siendo el principal factor de riesgo.

En geopolítica, el inicio de la campaña electoral en EE.UU. implicará probablemente un aumento de la polémica sobre el trade, con un incremento de la volatilidad en los mercados financieros en el 4T. Una victoria de Trump implicaría un cambio muy importante en nuestro escenario, mayores riesgos en todo lo ligado al trade, China, tecnología y Europa, freno al flujo migratorio en EE.UU. con su posible efecto negativo en el mercado laboral y en la inflación y fin del apoyo a Ucrania. Las elecciones francesas centrarán la atención en el corto plazo, el sistema de segunda vuelta suaviza las posibilidades de victoria de posiciones extremas, aunque no evita el riesgo de un gobierno débil. Por último, Taiwán es otro posible riesgo al que damos pocas probabilidades ya que el gobierno chino sigue muy centrado en la mejora de su economía.

En cuanto a resultados empresariales en Europa, pensamos que las buenas publicaciones y guías 1T, junto con las revisiones al alza de las expectativas de PIB de la Eurozona permitirán ver en los próximos meses revisiones al alza del actual bajo consenso de crecimiento de BPAs 2024 en Europa (4,5%).

Nuestra visión positiva en los mercados de renta variable se apoya en el inicio de las bajadas de tipos de interés (aunque sean más graduales de lo esperado) y en las revisiones al alza de expectativas de BPAs. En la historia, el inicio de la bajada de tipos por parte del BCE ha supuesto un comportamiento positivo de la bolsa en los siguientes 12M. Además, normalmente va acompañado de un buen tono general de todos los sectores, lo que puede suponer el fin de la concentración vista en bolsa en el último año. El aumento de operaciones de M&A junto con la posible vuelta de los flujos de renta variable a Europa serán también apoyos para la renta variable.

Nos posicionamos en Infraestructuras, Energía, Utilities, Alimentación, Tecnología, Telecoms y Lujo. Con una postura más neutral en Seguros, Banca, Farma y RE. Y negativos en Industriales, Retail y Autos.

Sara Herrando

Sara Herrando

  • Directora de Análisis de Norbolsa